lunes, 3 de agosto de 2009

Cicloturismo, ¿cuadro de acero o de aluminio?

Esta puede que sea una de las preguntas más frecuentes cuando alguien nos encarga una bici Fetamà para viajar.

La duda es lógica ya que desde hace años corren una serie de mitos sobre las ventajas de viajar con una bici de acero en contra de hacerlo con una de aluminio. Estos mitos tienen su buena parte de veracidad pero también es bueno contextualizarlos en tiempos más actuales.

Lejos de centrar las dudas en las cualidades del acero o del aluminio, lo que realmente preocupa a la gente es el miedo a poder reparar el cuadro en caso que se nos rompa en algún lugar remoto. A nuestra opinión es un miedo exagerado.


Cruzando el Atlas

Hoy por hoy, que un cuadro actual de cierta calidad se llegue a romper por fatiga es algo muy extraño. Antes que el cuadro, podemos romper otras muchas cosas más, que también son importantes y que seguro nos pueden complicar la vida. De esta manera podemos decir que lo más importante de todo es el cuidado general de la bici a lo largo de todo el viaje y no superar sus posibilidades. Y si por lo que sea se nos rompe el cuadro, ya sea de aluminio o de acero, los dos se pueden soldar en cualquier rincón del mundo si bien es cierto que nos será más fácil encontrar alguien que nos suelde el acero que el aluminio.

La verdad es que no tenemos una respuesta concreta a la pregunta inicial ya que opinamos que los dos materiales son aptos para bicicletas de viaje. Quizás valdría la pena fijarse en las cualidades de cada material y que cada uno elija según su criterio.

Por un lado tenemos el acero, que estaría bien no con fundir con el hierro. Este es un material que mantiene sus propiedades de elasticidad y rigidez durante toda su vida. La elasticidad es una característica muy buena para absorbes las vibraciones del terreno y estas no se transmitan al ciclista, de esta manera se consigue acumular menos fatiga en el cuerpo del ciclista. La rigidez también es una característica a tener en cuenta aun que pueda parecer contradictoria con la elasticidad. La rigidez en un cuadro nos asegura que la fuerza que generamos en las bielas se transmita correctamente a la rueda sin perder energía. Si un cuadro no es rígido este se deforma y si se deforma quiere decir que por allí estamos perdiendo la eficiencia de nuestro pedaleo. Por el contrario los cuadros de acero suelen ser algo más pesados que los de aluminio, entre 500 g y 1.5 kg en el peor de los casos. Esta es la diferencia de peso que pude haber entre una bici con cuadro de acero o una de aluminio.

En el caso del aluminio podemos destacar que es un material más ligero pero la diferencia de peso no es tan grande como para tener en cuenta solo este aspecto y más si tenemos en cuenta que una bici de viaje cargada con alforjas pude llegar a pesar fácilmente 45 kg…. El aluminio es un material muy rígido esto significa que no absorbe las vibraciones tan bien como el acero y poco a poco va fatigando al ciclista, además el aluminio no mantiene sus características a lo largo de su vida y va perdiendo la rigidez convirtiéndose en una cuadro más elástico.
Hasta aquí la opción de escoger un cuadro de acero o de aluminio es muy clara pero esto no significa que el aluminio sea un mal material para nuestra bici, las diferencia que estamos plasmando no son tan fáciles de percibir. Entonces las dudas se centran más en el peso, el precio y el romanticismo.

En cuanto el peso, las diferencias no son tan grandes si nos fijamos en el peso total de la bici, en 45 kg, 1kg más o menos no importa.

En cuanto al precio, Al contrario de lo que mucha gente piensa un cuadro de acero es más caro que uno de aluminio, la diferencia podría estar rondando los 200€ o más. La explicación podría ser la generalización del uso del aluminio para fabricar bicicletas dejando el acero para fabricar bicicletas más específicas.

El aspecto romántico es más valorado por las personas que buscan una compañera de viaje para toda la vida, en ese caso el acero gana muchos puntos por su longevidad.

Las siguientes fotos son del un viaje a Mongolia de la primera Fetamà que montamos para viajar:


Amaro (actualmente en reformas) escribió un artículo muy bueno explicando a la perfección a las cualidades de los materiales utilizados para fabricar bicicletas, acero, aluminio, carbono y titanio.

En el siguiente link podréis acceder a uno de los boletines de Amaro donde además de este artículo podréis encontrar uno que habla de geometrías con alguna entrevista que otra y algún pasatiempos.

Y para terminar, cuando os decidáis por el acero que sea de Cromo Molibdeno también conocido como Cromoly o Cr/mo.

Y la única condición en cuanto a aluminios, que sea de la gama 7005, siempre.

1 comentario:

Andres dijo...

Hola,
a pesar de que el tipo de ciclismo que practico dista un poco del cicloturismo, el artículo me ha resultado muy interesante, pues las ventajas e inconvenientes de cada material son iguales en el MTB.
He visto que el enlace a Amaro está roto, así que comparto con vosotros un artículo que he escrito recientemente y que compara los cuadros de acero, aluminio, carbono y titanio. Espero que les sea de interés.
Un saludo.